Junto a la maravillosa familia Hamm, la Flammenkuchen (flamencujen) representa uno de mis mejores recuerdos de la Selva Negra. Se trata de una base de pan fina cubierta por una mezcla de nata agria con cebolla y bacon que se hornea y al sacar a la mesa se flambea. Tengo el vago recuerdo de que el restaurante al que fuimos era un lugar tipo sidrería; vamos de menú único, algo así como un vayan pidiéndose unas cuantas Flammenkuchen con algo de ensalada y degusten nuestro Riesling al txotx!
Desde entonces, hará unos 20 años, he realizado unas cuantas Flammenkuchen en casa y tengo que comunicar al mundo mundial que la de este fin de semana es la definitiva. ¡Así que ahí va la receta!
Receta de la masa (da para 4 bases)
Para la masa, he seguido la receta espectacular de la Neo Neapolitan Pizza de Peter Reinhart.
680 g Harina de fuerza
14 g Sal
3 g Levadura seca de panadería
28 g Azúcar
482 g Agua a temperatura ambiente
28 g de Aceite de oliva
Se mezclan bien todos los ingredientes y se dejan reposar 5 minutos. Pasado ese tiempo se amasa durante unos 3 minutos. Sobre una superficie ligeramente aceitada se vuelca la masa, se divide en cuatro y se bolean las cuatro piezas. Hecho esto yo opto por congelarlas (aguantan meses). A la semana paso por la mañana un par de masas al frigorífico para que vayan descongelándose y las saco 90 minutos antes de cocinarlas.
Se prepara un plato sopero con unos 100 g de harina para ayudar a estirar la masa sin que se pegue. Lo primero es rebozar la masa en la harina para ir poco a poco estirándola. Pasados unos 20 minutos del primer estirado la masa volverá a estar relajada para un segundo estirado. Ir consiguiendo la forma final en estirados sucesivos.
Receta del relleno
130 ml de leche tibia
150 g de bacon ahumado en tiras finas
150 g de cebolla cortada en juliana
200 g de quark
200 g de nata líquida
Cuatro cucharadas soperas de aceite de oliva
Cuatro cucharadas soperas de aceite de oliva
Una cucharada sopera de harina
Una cucharada sopera de ron
Una pizca de sal
Mezclar todo salvo la cebolla y el bacon. Sofreir un poco el bacon y añadir parte del mismo y de la cebolla a la mezcla inicial.
Preparación
Calentar el horno al máximo. Se lanza una de las masas a la base del horno y se esperan unos 3 minutos. Se saca la base, se cubre con el relleno añadiendo más bacon y más cebolla y se devuelve al horno, esta vez a su parte superior poniendo en marcha el gratinador y el ventilador. En unos 6 minutos estará lista. Se le puede añadir pimienta o nuez moscada y se flambea para terminar.